Como punto de referencia, hemos de partir de la consideración que la escuela, como institución educativa, desempeña muchas y variadas funciones; pero si queremos, en un esfuerzo de síntesis, concretar en un término cuál debería ser su función principal; podríamos decir que es la de enseñar a pensar (creativamente, críticamente, autónomamente). Pero, si tratamos de entender y comprender qué es esto de pensar y por qué razón esahora el “nudo cordiano” del quehacer educativo, los argumentos no acostumbran a ser ni creativo, ni críticos ni autónomos. No hay más que revisar la abundante producción de libros, artículos, programas informáticos, y/o clases, conferencias psicopedagógicas impartidas por especialistas, que se limitan a ofertar un elenco de recetas (que no herramientas) con las que, con mayor o mejor dificultad, podemos dar respuesta a los requerimientos de concepción “escolástica” de pensar:
- Velocidad/comprensión lectora
- Dónde/cuándo/cómo estudiar
- Subrayados/esquemas/resúmenes.
- Cómo preparar un examen y un largo etcétera que, efectivamente, tiene una función instrumental
Nadie discute ni pone en tela de juicio la eficacia, a corto/largo plazo (aunque no siempre ni para todos los alumnos), de estas habilidades que efectivamente cumplen su finalidad metodológica en el arduo oficio de aprender en los distintos contextos académicos, constituyendo a la par una buena ejercitación intelectual, pero que evidentemente no son el núcleo de lo que llamamos pensar. No se trata, por tanto, del entrenamiento de técnicas de estudio con “efectos especiales y/o espectaculares”, sino de la construcción del pensamiento. Por tanto, no es lícito reducirlo todo a “procesos milagrosos”, a no ser que pretendamos adaptar al alumno a las rutinas de una función docente predeterminada, como si todo el proceso de aprendizaje se volviera un acto de adiestramiento socializado continuo y permanente, adornado con ciertos contenidos disciplinares más o menos contextualizados, y es que si la escuela no es capaz de enseñar a pensar, es que realmente no es escuela; y enseñar de verdad no es limitarse a impartir y repartir dosis tremendas de información, y de tanto en tanto controlar su ingestión. Como contrapartida de lo anteriormente expuesto, la escuela deberá asumir el reto de que sus alumnos esan capaces de:
1. Conocer, trabajar y desarrollar diferentes procedimientos de estudio y aprendizaje en función de sus condiciones y características personales, demanda, objetivos y factores externos.
2. Manejar procedimientos estratégicos de orden superior en función del análisis y discusión de casos, imitación de modelos y mecanismos de interrogación.
3. Tomar conciencia de sus propios procesos cognitivos antes, durante y después de la realización de una actividad intelectual.
4. Reflexionar sobre sus razonamientos dando un significado más personal y profundo a aquello que trabaja.
5. Aprender a planificar, regular, controlar y valorar su pensamiento, a fin de optimizar su rendimiento.
6. Organizar la información desarrollando las distintas habilidades metacognitivas (observación, comparación, clasificación, representación, retención y recuperación, interpretación, inferencia, transferencia y evaluación).
1. Estrategias de aprendizaje versus Técnicas de estudio
Tomando como referencia lo anteriormente expuesto, el proceso educativo tiene un carácter eminentemente dinámico, por lo que es importante, dentro del acto didáctico, considerar los procesos de enseñar a pensar y de enseñar a aprender que, en definitiva, son mecanismos que favorecen el conocimiento de uno mismo, ayudan al aprendiz a identificarse y a diferenciarse de los demás. Los estudiantes llegarían así a ser conscientes de sus motivos e intenciones, de sus propias capacidades cognitivas y de las demandas de las tareas académicas, llegando a ser capaces de controlar sus recursos y regular su actuación posterior (trabajo importante de tutoría y orientación).
A este respecto, es importante llevar a efecto una serie de matizaciones conceptuales. Frecuentemente se habla de técnicas de estudio y de su falta como un factor negativo en el proceso educativo; los alumnos no saben estudiar, carecen de método. Es muy cierto que tradicionalmente el acto didáctico se ha caracterizado por una transmisión casi unívoca de los conocimientos (con mucha frecuencia solamente conceptuales) sin pararse a reflexionar sobre los procesos cognitivos que el alumno desarrolla o debería desarrollar para la adquisición de determinados aprendizajes. También se ha abordado el dominio de ciertas técnicas como el aprendizaje de métodos para aprobar.
Y es que en realidad el conocimiento de unas determinadas técnicas no es sinónimo de éxito, pero la ayuda a la realización y concreción de trabajos educativos. No podemos pretender nada más que enseñar y aprender técnicas y los procedimientos algorítmicos de su uso. Hemos de procurar razonar y determinar la conveniencia de su utilización en función de diferentes factores personales, ambientales, de la demanda del trabajo.
Esta actitud de análisis, previa a las condiciones que envuelven un hecho didáctico, supone un nivel superior de procedimientos de aprendizaje. Nos referimos a una actitud estratégica hacia las cosas. Es aquello que haría un experto delante de un tema de su dominio. Primero, planificaría la acción y sus posibles consecuencias. Más tarde, desarrollaría y regularía el procedimiento escogido, para acaber evaluando todo el proceso.
La práctica estratégica genera inferencia y transferencia de los contenidos a otros ámbitos semejantes y, por consiguiente, esta negociación intra-inter psicológica (metacognición) hace crecer la zona de desarrollo próximo del individuo.
Entendemos por metacognición a la capacidad que tiene el ser humano de autorregular el propio aprendizaje, es decir, de planificar qué estrategias se han de utilizar en cada situación, aplicarlas, controlar el proceso, evaluarlo para detectar fallos y, como consecuencia, transferir todo ello a una nueva situación.
Esto implica dos dimensiones muy relacionadas:
a. El conocimiento sobre la propia cognición implica ser capaz de tomar conciencia del funcionamiento de nuestra manera de aprender y comprender los factores que explican los resultados de una actividad, sean positivos o negativos.
b. Las regulación y control de las actividades que el alumno realiza durante su aprendizaje. Esta dimensión incluye la planificación de las actividades cognitivas, el control del proceso intelectual y la evaluación de los resultados.
Aunque estos dos aspectos están muy relacionados, el primero, el conocimiento del propio conocimiento, surge más tarde en el niño que la regulación y el control ejecutivo, ya que éste último depende más de la situación y de la actividad concreta.
Como punto de partida, el alumno ha de desarrollar y perfeccionar los procesos básicos (capacidades cognitivas básicas) con la ayuda de las técnicas de aprendizje. En segundo lugar, el alumno ha de tener unos conocimientos específicos del contenido a aprender. El saber planificar, regular y evaluar, qué técnicas, cuándo y cómo, por qué y para qué, se han de aplicar a unos contenidos determinados con el objetivo de aprenderlos, hace que el aprendiz se vuelva estratégico.
Una vez hechas estas consideraciones generales, vamos a matizar, de manera más concreta, lo que entendemos por estrategias de aprendizaje y técnicas de aprendizaje.
Concepto de estrategia de aprendizaje
1. Es un proceso de decisión consciente e intencional orientado a un objetivo.
2. Supone la selección y activación de conocimientos declarativos y procidementales.
3. En función de un conocimiento condicional del contexto.
4. Definido por:
- Condiciones personales.
- Condiciones de tarea.
- Condiciones de la dinámica instruccional.
5. A partir de las que se regula:
- La planificación de la actividad.
- La ejecución de la actividad.
- La evaluación de la actividad.{mospagebreak}
2. Delimitación conceptual de las técnicas de estudio.
Las técnicas de estudio han de ser entendidas como un elemento metodológico e instrumental que mediatice la prácitca y ejercicio de la actividad académica a fin de alcanzar los objetivos anteriormente indicados.
Estas técnicas han de ser interpretadas, por tanto, como un conjunto de herramientas, fundamentalmente lógicas y estructuradas, que ayuden al alumno a mejorar su rendimiento y que faciliten el proceso de aprendizqje y estudio; en definitiva, proporcionarles un método de trabajo que le permita optimizar su esfuerzo en sus tareas de trabajo intelectual.
Es importante, a este respeto, que nuestros alumnos tomen conciencia de que el proceso de aprendizaje no pasa únicamente por la incorporación de una serie de contenidos/información que nos hacen competentes en una determinada materia (elemento clave por otro lado, dado el nivel de competitividad en el cual se encuentra nuestro sistema social), sino que, además, la incorporación de nuevos aprendizajes a los que ya tenemos nos van a proporcionar una estructura de pensamiento y capacidad de respuesta ante determinadas situaciones sociales y personales.
3. Herramientas que debo manejar para mejorar los resultados de mi estudio
3.1 Leer y comprender
- Tratar de encontrar la idea principal e idenficiar los detalles o ideas complementarias.
- Se deben hacer dos lecturas:
* Una global para identificar los apartados y las ideas más importantes.
* Otra parcial, más detallada, tratando deentender todo lo que pone (lectura comprensiva), fijándose bien en gráficos, ilustraciones.
- La lectura debe ser rápida pero no tanto como para no entender lo que pone. Necesitas atención y concentración.
- Hay que tratar fde leer varias palabras de un golpe de vista.
- Evitar tener que volver a leer los párrafos o palabras por las que se ha pasado (regresiones).
- La lectura debe ser silenciosa, evitando leer con los labios, vocalizar o hablar en voz alta. Evitar ir poniendo el lápiz o los dedos por donde se lee.
- Anota en un cuaderno las palabras o frases que no entiendas o las ideas que te surjan. Recurre al diccionario o al profesor para solucionar tus dudas. También pueden anotarse en el margen del libro. Esto te obliga a concentrarte y a darte cuenta del grado de comprensión del texto que lees.
3.2 La velocidad lectora.
- Para aumentar la velocidad lectora tenemos que partir de los fundamentos de lo que es leer. Al leer nuestros ojos van moviéndose a base de saltos o fijaciones en las que se agrupan una o varias palabras. Por lo tanto, para aumentar la velocidad lo que tenemos que pretender es realizar el menor número de fijaciones posibles en cada línea para así en una sola fijación abarcar el mayor número de palabras posibles.
Lo veremos mejor con un ejemplo:
”En las playas / de todos los mundos / se reúnen los niños /
El cielo infinito / se encalma / sobre sus cabezas / el agua / impaciente se alborota. / En las playas de todos los mundos / los niños se reúnen / gritando y bailando” /
En los espacioes entre las barras son el grupo de palabras que se perciben de un solo golpe de vista, (fijación por un lectornormal).
Intenta practicar todo lo que puedas con textos que te atraigan, pero ten en cuenta que la poesía puede ayudarte a mejorar la velocidad, ya que las frases y líneas son más cortas.
- También se puede mejorar la velocidad lectora de la siguiente manera:
* Elige tres páginas seguidas de un libro que te motive y que estén más o menos igual cubiertas de texto.
* La primera hoja la tienes que leer a la velocidad que normalmente lo hagas pero procurando entender lo que lees.
* La segunda hoja, a continuación la lees a la mayor velocidad posible, sin preocuparte de entender lo que lees o en si te saltas palabras y sin volver atrás.
* Por último, la tercera página la lees a la mayor velocidad que puedas, pero esta vez asegurándote que entiendes lo que lees y siguiendo las pautas de las que hablábamos antes de las fijaciones y de procurar no volver atrás (uno de losmayores problemas de los lectores lentos).
* Al terminar de leer la tercera hoja apunta el tiempo que te llevó esta última. Este ejercicio lo debes realizar cinco días a la semana durante aproximadamente tres semanas y luego descansa uno. Si la velocidad ves que no aumenta, repite este tipo de ejercicio o prueba la siguiente técnica.
- Coloca una postal bajo la línea que lees, tratando de ir aumentando progresivamente la rapidez de la lectura y leyendo cada línea con sólo tres o cuatro fijaciones, según sea la longitud.
3.3 La comprensión lectora.
- Podemos ahora pasar a hablar de un método, más que de una técnica, demejora de la comprensión lectora. El método ELPL2R responde a un estilo másminucioso y detallado de la lectura que puede ser utilizado como método de estudio.
Cada letra del grupo EPL2R responde a la inicial de cinco pasos que se proponen en la lectura de cualquier texto:
- EXPLORACIóN: Consiste en saber de qué va el texto antes de ponernos a trabajar en el. Haz una primera lectura rápida para coger una pequeña idea del mismo.
- PREGUNTAS: En esta fase nos planteamos una serie de preguntas fundamentales acerca del texto que creemos que tenemos que saber responder después de la lectura. Podemos transformar en preguntas los encabezamientos y títulos.
- LECTURA: Esta es la fase propia de la lectura, que debe ser con el ritmo propio de cada uno,haciendo una lectura general y buscando el significado de lo que se lee. Si esnecesario,busca en el diccionario las palabras que desconoces. En una sesión de estudio aquí incluiríamos el subrayado, lasnotas al margen, etc.
- RESPUESTAS: Una vez terminada la lectura analítica anterior, pasa a contestar las preguntas que te planteabas anteriormente y si es necesario hazte alguna pregunta más específica, concreta o puntual sobre el texto y su contenido.
- REVISIóN: Consiste en una lectura rápida para revisar el texto o tema leído. Se ven los puntos que no quedaron claros y se completan las respuestas. Aquí en una sesión de estudio introducimos los esquemas y resúmenes.
3.4 El subrayado.
- El objetivo del subrayado es destacar las ideas esenciales de un texto. Posteriormente, al leer únicamente lo subrayado, sabemos que es lo que deberemos recordar del contenido del texto. Podemos decir también, que subrayar consiste en destacarmediante un trazo las partes esenciales de une scrito. Se trata de ahorrar esfuerzo después.
- Existen teorías psicológicas de la percepción humana que fundamentan esta técnica, ya que está demostrado que la memoria se fija y recuerda más y mejor aquellas cosas que se resaltan.
- Su fundamento consiste en resaltar en otro color (se recomienda utilizar colores vivos como el rojo o verde o los colores fluorescentes aunque cansan más) las ideas principales, las palabras técnicas y los datos importantes (si subrayas poco perderás información, si subrayas casi todo no sirve de nada).
- Para subrayar no se recomiendan más de dos colores y también se puede sustituir la raya por el recuadro o corchete para señalar párrafos enteros o frases que consideremos importantes. Subraya si es necesario en tus libros (están para tu servicio y no para adornar) y en tus apuntes o fotocopias. Es recomendable que el subrayado se realice a lo largo de la segunda lectura del texto o tema que tenemos que estudiar. Pero también se puede ir señalando algunos datos o ideas principales en la primera lectura rápida.
- También es bueno acostumbrtarse a escribir notas o comentairos a los márgenes, en aquellos momentos en que no te queden claras algunas ideas o para completar datos (¡¡ = IDEA importante, ¿? = duda o idea posiblemente errónea, flechas para relacionar, asterisco para hacer llamadas, etc.)
- Como ya señalábamos anteriormente, en la segunda lectura, reposada, comprensiva y analítica, es cuando debemos hacer estas operaciones y también es el momento de pararnos a comprender las gráficas, tablas, mapas o recuadros. En muchas ocasiones aportan gran cantidad de información, de una manera reducida y clara, que nos ayudan a comprender mejor lo que estamos leyendo y de una forma más directa.
3.5 El resumen.
- El resumen es una de las actividades más importantes y claves dentro del estudio. La puedes realizar después de tener hecho el subrayado y posteriormente a haber estudiado el tema, lección o texto. Tienes que intentar hacerlo sin volver a mirar lo que has leído y, si no, lo haces lo menos posible. Este resumen debe ser breve pero completo, con las ideas fundamentales yt utilizando tu propio vocabulario y modo de estructuración de las oraciones. Redactado en forma personal. Tienes que utilizar partículas de enlace entre los distintos párrafos que produzcan la hilazón entre los mismos. Es evidente que un buen resumen depende mucho de la comprensión del texto y de las eces que lo hayas leído (son recomendables tres: una rápida, otra lenta con subrayado y otra más lenta con memorización y análisis).
- El resumen se utiliza para sintetizar el contenido de un texto que luego hay que comentar o estudiar. Facilita el mejor estudio de la lección y su comprensión y, a su vez, facilita la concentración mientras estudias. Con un buen conjunto de resúmenes de las distintas lecciones puedes realizar un repaso final muy positivo de lo que has estudiado.
3.6 Los esquemas y los cuadros sinópticos.
- Un esquema debe presentar las ideas centrales del texto, destacadas con claridad. Presenta de forma sencilla y lógica la estructura del texto. Debe tener una presentación limpia y clara. En el esquema se detacan los puntos principales del texto y los subapartados que consideres de interés.
- Para trabajar el esquema, parte de la lectura analítica de un texto y de su posterior subrayado y resumen. Vete separando cada contenido por puntos, rayas y subrayados. Mira si lo que has escrito expresa la idea completa del texto sin dejarte datos fundamentales.
- El esquema es como un resumen pero más esquematizado, sencillo y claro. Con un solo golpe de vista podemos percatarnos de la información que contiene el texto estudiado.
- Hacer el esquema es lo que más tiempo te va a llevar, pero es imprescindible. Tener un buen esquema y dedicar tiempo a estudiarlo es la clave del éxito.
- Debe incluir toda la información que debas saber para tu examen, control o estudio; no puedes perder la información.
- Hay que ahorrar todo el espacio que se pueda para tener la mayor información posible de un vistazo.
- Poniendo la hoja en horizontal se aprovecha mejor el espacio.
- Es bueno utilizar símbolos y abreviaturas para ahorrar espacio. Puedes tener tus propios símbolos y abreviaturas. Además, te vendrán bien para tomar apuntes de forma rápida.
- Evita utilizar palabras innecesarias. No olvides dibujos, gráficos, fórmulas y diagramas.
- Es bueno subrayar el esquema, incluso con distintos colores, y marcar las ideas o datos más importantes.
- Acostúmbrate a hacer esquemas con llaves, aunque las flechas también son útiles. Los apartados del texto pueden coincidir con los apartados de tu esquema.
- El esquema nos ayuda a memorizar mejor.
- De cara a la preparación de un examen es importante que tengas en cuenta los siguientes aspectos:
- Es imposible hacer los esquemas uno o dos días antes del examen. No da tiempo y esos días previos al examen son vitales para memorizar el esquema. Los esquemas hay que irlos haciendo a medida que vamos estudiando día a día y lección tras lección.
- Memorización del esquema:
*Se supone que tienes hecho el esquema y resueltas las dudas.
* Es importante organizarse para reservarse la última o dos últimas tardes antes del examen para memorizar y afianzar estos esquemas de trabajo.
* No puede hacerse la memorización muy lejos del examen (se olvida) ni muy cerca (no te da tiempo). Si vas a tener varios exámenes en un día puedes memorizar dos días antes, pero dedica siempre unas horas antes del examen para repasar la memorización.
* La memorización es la tarea más dura del estudio. Procura estar despejado.
* Se trata de leer y comprender el esquema y a continuación reproducirlo mentalmente o sobre el papel. Si ves que no lo has retenido, repite la operación.
* Ve memorizando, de esta manera, trozos del esquema y cuando acabes con un apartado trata de volver a reproducirlo mentalmente o sobre el papel, pero ahora completo. Cuando acabes un tema trata de reproducirlo de forma completa para tener una visión de conjunto relacionando ideas y enlazando con otros temas o contenidos aprendidos.
* El esquema nos va a servir como herramienta de estudio para retener información relevante y/o como medio para desarrollar de forma más amplia el contenido de un tema ya que nos permite seleccionar y estructurar la información.{mospagebreak}
3.7 La atención y la concentración.
-La atencion y la concentración son fundamentales para aprovechar las horas de estudio y las explicaciones dadas por el profesor en clase. Para muchos alumnos esto es un verdadero problema. La necesidad de estar atentos y de concentrarse en el estudio es algo básico, pero existen muchos elementos que influyen en esta atenció:
*La motivación y el interés con que estudiamos.
*Las preocupaciones: problemas familiares, problemas con los compañeros, problemas con los amigos, preocupaciones amorosas, etc.
* Las preocupaciones causan mucha ansiedad y desconcentran nuestra mente a la hora de estudiar o atender.
* El lugar en que se estudia y las condiciones del mismo.
* La fatiga: nop se puede estudiar estando cansado o con sueño.
- Pero podemos hacer algo para que estos factores nos influyan lo menos posible. Intenta motivarte, piehnsa que lo que haces es para ti, si o ten por seguro que fracasarás. ¿Por qué estudio? ¿Qué deseo llegar a ser? ¿Qué puede aportarme el estudio a mi formación como persona? Respóndete a estas preguntas y a partir de ahí, actúa. Piensa en ti, en tu futuro, en tus ideas, en tus ilusiones, no te dejes llevar por las situaciones adversas que te rodean, ni por los comentarios, ni por las ideas del paro; lucha, esfuérzate y sigue adelante.
- También debes intentar resolver los problemas o las preocupaciones. Afronta los problemas. Búscales una salida. Siempre hay una solución. Busca consejos, busca ayuda de los profesores, amigos, padres, profesionales.
- Cuida tu estado físico y descanso. La alimentación, el deporte, el tiempo de ocio y el sueño.
- La atención, por tanto no es sólo algo relacionado con la fuerza de voluntad. También debemos tener en cuenta todo lo expuesto anteriormente. Para eliminar el aburrimiento estudia de forma activa y dinámica: con bolígrafo y papel. Toma notas, subraya, haz esquemas, busca en el diccionario las palabras que no entiendas, pregunta dudas. Cuando estés en clase, toma apuntes, mira al profesor, pregunta cuando no entiendas algo. Seguir las explicaciones de la clase es uno de los momentos a los que más rendimiento y partido se le puede sacar. Sé positivo tanto con el profesor como con la materia. No te hundas por las adversidades que vayas encontrando. Todo esto garantizará el aprendizaje de cualquier contenido.
3.8 La memoria y las reglas mnemotécnicas.
- Es evidente que en todo proceso de estudio la memoria es uno de los elementos fundamentales. La memoria y el proceso memorítico está formado por tres fases: registrar, retener y rememorar. Nuestra memoria es como un gran armario o archivador en el que es evidente que encontraremos mejor las cosas si las tenemos ordenadas de una forma lógica. También está demostrado que recordaremos más y mejor aquello que comprendemos (por eso no es conveniente "chapar" sin saber lo que "chapamos").
Registrar: en esta fase adquirimos el contacto con los elementos que posteriormente memorizaremos. Sería la primera lectura. Para tener más claros estos conceptos que leeremos, usamos el subrayado, los esquemas, los resúmenes o fichas. Pero, es fundamental que lo que leamos y escribamos lo hagamos de una forma ordenada, lógica y comprendiendo lo que se lee. No os pongáis a estudiar un tema de matemáticas que se fundamente en uno anterior que no habéis leído, o no intentéis estudiar el por qué de la Guerra Civil si no habéis mirado anteriormente lo que pasó en los años previos.
Retener: Cuanta más atención prestemos a lo que intentemos memorizar, más fácil será retenerlo. ésta es una premisa básica dentro del proceso de la memorización: LA ATENCIóN. Por esta razón, el interés y la moritavión ante lo que estamos leyendo y pretendemos memorizar es algo básico. Es fundamental la concentración: aislaros de ruidos, olores, gente que pasa por la habitación, de la televisión e incluso de la música. No es recomendable estudiar con música cuya letra conocemos, esto nos distraerá. Tampoco es bueno estudiar con la radio y, por supuesto, la televisión es nefasta. Si queréis estudiar con música, hacerlo con clásica o instrumental. Para retener las cosas, relee los textos sólo con lo subrayado, relee las fichas o anotaciones y por supuesto los temas.
Rememorar: éste es el proceso más importante y el que más suele interesar a los alumnos. El recordar aquello que hemos memorizado. Para ello, la manera de haberlo retenido (ordenado con lógica, con notas, subrayados, esquemas) va a ser fundamental y también del interés que hayamos puesto en ello. A veces intentamos recordar algo que sabemos claramente que lo hemos estudiado, pero como no lo hicimos de la manera correcta y con la lógica necesaria, nos es imposible rememorarlo. Es importante, por tanto, insistir en la lógica, el orden, la intención. Pero es que realmente son las piezas claves de la memoria.
- Dentro del tema de la memoria, tenemos que especificar que existe la memoria a corto plazo y la memoria a largo plazo (esta segunda es la que al alumno más interesa). En un principio, cuando empezamos a estudiar, la información pasa a la memoria a corto plazo, pero lo que tenemos que pretender es enviarla a la memoria a largo plazo, que es la que pervive y la que necesitamos a la hora de los exámenes o pruebas objetivas. Para que la información pase a la memoria a largo plazo es necesaria la repetición, la concentración, el orden y la lógica y sobre todo el interés por esos contenidos que queremos memorizar. Lo que sí es evidente es que se recuerda mejor lo que previamente hemos escrito o lo que previamente hemos clasificado. Por eso, es importante insistir en el sugrayado, los resúmenes, los esquemas y las fichas.
- Las reglas nemotécnicas son un conjunto de truquillos, casi siempre lingüísticos para facilitar la memorización. Se basan en que recordamos mejor aquello que nos es conocido o aquello que nosotros mismos hemos creado.
Autora: Ma. Asunción Gómez Campillejo.
Doctora en pedagogía. Profesora del Departamento de Métodos de Investigación y Diagnóstico en Educación. Facultad de Educación de la Universidad Complutense de Madrid.
Fuente: Polibea, No. 68 Año 2003
Publicado en Paso a Paso, Vol. 16 No. 1